5 tendencias de empleo que marcarán 2023 en el Sur de Europa

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Analizamos las tendencias de empleo que pueden esperar en 2023 las empresas de España, Italia y Portugal.

 

1. El posicionamiento tecnológico del Sur de Europa motivará la llegada de perfiles IT

No es ningún secreto que el Sur de Europa se está convirtiendo en un punto de atracción para hubs tecnológicos. España, Portugal e Italia albergan ecosistemas de IT en auge y ofrecen estilos de vida muy llamativos para quienes buscan unirse a ellos. Por ello, en 2023, la oferta de talento en la región será mayor que antes. No obstante, las organizaciones tendrán que estar más preparadas que nunca a la hora de hacer frente a la competencia por candidatos procedentes de las economías más ricas del norte, ya que cada vez más empresas buscan aprovechar las crecientes canteras de talento del sur.

 

2. La incertidumbre económica ralentizará la rotación de puestos de trabajo

Debido a la preocupación por la inflación y la inminente crisis por el aumento en el coste de vida en toda la región, los profesionales serán más cautelosos a la hora de abandonar sus puestos de trabajo por temor a la inestabilidad financiera. Para luchar contra los probables descensos de productividad y moral de sus empleados, las organizaciones tendrán que hacer esfuerzos adicionales para volver a motivar al personal que preferiría estar en otro lugar.

Cuando existen necesidades de contratación, aumentar la búsqueda de personal flexible y/o temporal podría permitir a las organizaciones una valiosa agilidad en un ciclo económico tan volátil.

 

3. Las organizaciones se enfocarán en mejorar las habilidades de sus empleados internamente

Con un panorama económico incierto en toda la región, las empresas que buscan talento querrán que sus equipos produzcan resultados a corto y medio plazo. Esto podría significar que las empresas se decanten más por candidatos con experiencia que por recién licenciados con potencial, especialmente si se tiene en cuenta la brecha que se percibe entre los resultados del sistema educativo y lo que las organizaciones realmente necesitan.

Cuando haya escasez de competencias y experiencia clave, las empresas buscarán la mejora de habilidades de sus trabajadores mediante programas de formación internos.

 

4. La inflación salarial presionará a las pymes a tomar decisiones compleja

Las pymes también tendrán que hacer frente a la inflación. Estas organizaciones tendrán que calcular en qué medida pueden aumentar los salarios de sus empleados en función de sus flujos de ingresos y sopesar qué parte de estos costes pueden trasladar a sus clientes. Las multinacionales pueden suavizar el golpe integrando otros beneficios como parte de planes de remuneración más amplios, pero las pymes suelen encontrarse con más dificultades para aplicarlos.

Dar respuesta es nada fácil, pero aconsejamos no pagar a los nuevos empleados más que a los actuales con más rendimiento. Dicho esto, ¿aprenderemos alguna lección de las recientes crisis inflacionistas en LATAM?

 

5. La cultura y los valores empresariales serán cada vez más decisivos para los profesionales

Actualmente, los europeos del sur ven el mundo del trabajo de una forma más holística que antes. La gente quiere seguir sus sueños, desempeñar un papel productivo en la sociedad y trabajar para empresas cuyos valores comparten. Para atraer y retener a los mejores talentos, las organizaciones tendrán que pensar a largo plazo en su propuesta de valor como lugar de trabajo, evaluando de qué manera se proyecta y traslada su cultura de empresa a sus trabajadores.

Recomendamos ofrecer a los empleados un proyecto en el que puedan creer. De esta forma, se cosecharán resultados positivos de forma rápida y sostenible en el tiempo.

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