10 Formas de caerle bien a tu entrevistador 

En una entrevista sólo dispones de un tiempo limitado para establecer una buena relación con tu entrevistador. No cabe duda de que a unos les resultará más fácil que a otros.

Sin embargo, si fomentas una conexión significativa con tu entrevistador, influirá positivamente en el resultado de la entrevista. Al fin y al cabo, la gente contrata a gente que le cae bien.

Así pues, sólo tienes una hora (o quizá menos) para convencer a tu entrevistador de que le gustas y de que te ve trabajando a su lado. Creemos que en este breve periodo de tiempo es posible establecer una buena relación.

1. Sonríe

Haz un esfuerzo consciente por sonreír cuando te presenten por primera vez, cuando te despidas y con regularidad a lo largo de la entrevista. Puede parecer una obviedad, pero es curioso cuánta gente no lo hace. He conocido a muchos entrevistados que no sonreían. Dado que los nervios serán un factor a tener en cuenta, haz un esfuerzo deliberado.

2. Estrechar la mano

Sé el primero en extender la mano para dar un apretón firme y saludar a tu entrevistador. De nuevo, puede parecer obvio, pero la primera impresión es vital.

3. Mantén el contacto visual

Establece y manten el contacto visual durante la reunión. Demasiado contacto visual es claramente desagradable, así que desvía la mirada con regularidad, pero mantén ese contacto. Si nunca encuentras la mirada de tu entrevistador, darás la impresión de estar ligeramente tímido, nervioso o totalmente desconectado.

4. Recuerda el nombre de tu entrevistador

Haz un esfuerzo consciente por recordar el nombre de tu entrevistador y utilízalo a menudo y al marcharte. Es un viejo truco que utilizan los políticos para establecer una buena relación con los periodistas que les entrevistan, y es sorprendentemente eficaz.

5. Crear un diálogo 50/50

Crea un diálogo 50/50 en el que escuches tanto como hables y no dejes todas tus preguntas para el final de la reunión. Demuestra que estás interesado -y escuchando- haciendo preguntas inteligentes (deberías haber pensado en algunas preguntas relevantes como parte de tu preparación). También puedes resumir o parafrasear algo que haya dicho tu entrevistador y repetírselo en forma de pregunta. De nuevo, esto demuestra que estás prestando atención.

6. Recuerda que tu entrevistador es humano

Ayuda a tu cerebro a poner las cosas en perspectiva y a mantener los nervios a raya recordando que tu entrevistador no es más que otro ser humano, que también puede sentirse ansioso. Esto te ayudará a romper las barreras.

7. Haz que el entrevistador se sienta importante

Investiga sobre la empresa, el entrevistador y el puesto al que optas (LinkedIn es un buen recurso para ello). Es inevitable sentirse halagado y establecer una buena relación con una persona que tiene conocimiento interno sobre la empresa y el entrevistador. Prepárate con algunas preguntas de seguimiento que te ayuden a establecer una conexión más sólida; por ejemplo, podrías preguntarle por su trayectoria profesional o su historia en la empresa.

8. Refleja el lenguaje corporal

La imitación es la forma más sincera de adulación, y reflejar el lenguaje corporal puede ayudar al entrevistador a imaginarse que trabajas con él. El reflejo puede ser cualquier cosa, desde la forma de hablar y el tono de voz hasta los gestos. Hazlo con sutileza. Adaptarse al comportamiento del entrevistador también puede ayudar a que ambos os sintáis más cómodos.

9. Sé memorable: Muestra tu verdadero yo

No tengas miedo de mostrar tu personalidad para que el entrevistador vea quién eres realmente. Responde a las preguntas con sinceridad y claridad. Y recuerda que un entrevistador experimentado puede detectar fácilmente los signos de un candidato que se esfuerza demasiado.

10. Seguimiento posterior

Tras la entrevista, envía un correo electrónico agradeciendo al entrevistador su tiempo y reiterando lo mucho que te ha gustado conocerle. Envíalo antes de que el entrevistador tenga la oportunidad de olvidarte.