¿Cómo están abordando la crisis climática las empresas, grandes y pequeñas, del sector tecnológico?
En lo que respecta a la crisis climática, existe un consenso en cuanto a que se nos está acabando el tiempo para cambiar de rumbo. El sector tecnológico desempeñará un papel decisivo en la identificación de soluciones para tratar de reducir y reparar el daño provocado, tanto en la búsqueda de alternativas limpias, como en la adaptación de los medios técnicos para que sean más sostenibles.
Para abordar esta cuestión, dirigentes de organizaciones del sector cleantech (tecnología limpia) y de empresas comprometidas con un mundo más ecológico han hablado con Hays Technology sobre sus historias, retos y objetivos.
En España la start-up ESUS Mobility fue elegida entre las 10 primeras en las categorías CleanTech e Industry Challenge de la competición Super Connect for Good 2021. Su historia comenzó dándose cuenta de que los patinetes eléctricos, aunque respetuosos con el medio ambiente, no satisfacían las necesidades cotidianas de las personas. William Venturim, director general, explica que se fijaron de que en Valencia se utilizan patinetes eléctricos para trasportar alimentos, paquetes y a veces incluso niños en condiciones nada seguras. Su objetivo fue ofrecer vehículos que cubrieran todas las necesidades de los ciudadanos actuales y, a su vez, funcionaran con energía eléctrica.
La empresa radicada en Reino Unido Electric Miles, ganadora regional de la competición Super Connect for Good, ofrece soluciones para usuarios de vehículos eléctricos. En opinión de su director general y fundador, Arun Anand, la adopción de vehículos eléctricos constituye un método efectivo de reducir las emisiones de carbono y, además, garantiza la eficiencia y el ahorro de energía. En un acto en directo de Tech Founders celebrado recientemente con Hays Technology, Anand comentó: “El 90 % del tiempo los coches simplemente están aparcados en la acera sin más... en una o dos semanas, si no tocas el coche, se agota la batería.
Si el 90% del tiempo están ahí parados, pueden convertirse en centrales eléctricas en movimiento. Se pueden lograr muchas cosas muy ingeniosas, como dar energía a tu casa, a la lavadora, al lavavajillas... todo mientras lo tienes aparcado fuera”.
Andy Gomarsall, MBE, ganador de la Copa del Mundo de Rugby con Inglaterra en 2003, es el actual presidente ejecutivo de N2S, una organización que recicla y reutiliza equipos eléctricos en el Reino Unido. El objetivo de la empresa es reducir los residuos electrónicos ampliando la vida de los equipos tecnológicos para crear una economía circular. Al explicar su motivación para dirigir el negocio, Andy usó una analogía deportiva: «Hay que cambiar las reglas de juego y hacerlo en beneficio de las generaciones futuras. Realmente no estamos dejando este mundo en las mejores condiciones. Eso es lo que me motiva a levantarme todas las mañanas».
A pesar de llevar trabajando en N2S cerca de 12 años, Gomarsall sigue encontrando razones para luchar por un mundo sostenible. Hace referencia a un reciente documental sobre la vida durante el confinamiento que tuvo lugar en 2020: “Es la película más extraordinaria que he visto nunca, me impactó mucho. Pude ver cómo La India la gente se subió a los tejados para poder ver el Himalaya porque no había contaminación. Cuando nos paramos a comprobar toda la contaminación que sufre nuestro planeta, es como una especie de revelación».
Gracias al desarrollo tecnológico, se han logrado avances nunca vistos para reducir la contaminación y las emisiones perjudiciales. Sin embargo, si esta tecnología no se aplica de forma adecuada, no se podrá aprovechar en su totalidad.
¿Cómo podemos saber que vamos por buen camino? Linian Li, tras estudiar y trabajar en Canadá y Europa, lleva más de una década al frente de la empresa Modern Water en China. Modern Water utiliza tecnología vanguardista, como inteligencia artificial, para vigilar la contaminación en el suministro de agua. Li explica que tras estallar la pandemia ha habido un gran aumento en la demanda para la empresa ya que cada vez más personas se dan cuenta de la realidad. Siendo conscientes de la escala mundial de este problema, Modern Water pone al alcance del público sus conocimientos y análisis a fin de mejorar la calidad del medio ambiente, en particular en las regiones menos desarrolladas.
En opinión de Arun Anand, de Electric Miles, sería de gran ayuda reducir nuestra dependencia de los vehículos propulsados por gas. Dado los hábitos de consumo y los factores económicos, ¿es realista pensar que los vehículos eléctricos conquistarán el mundo entero? Cuando le preguntamos por la posibilidad de su adopción en el sudeste de Asia, su respuesta fue: “El mercado indio obviamente es muy interesante. Hay 1.400 millones de personas. ¿Alguna vez se logrará un 100% de adopción de vehículos eléctricos? No, ni te lo plantees, no es una estrategia acertada. ¿Cuáles son los mayores contaminantes por carretera en países como India e Indonesia? Los autobuses y los camiones. ¡Es mejor proveerlos de electricidad a ellos primero! Olvídate del mercado de pasajeros, es demasiado caro y no existe infraestructura”.
Este es un problema mundial. Gomarsall, que concede su entrevista mientras recorre Londres en una bicicleta parcialmente eléctrica, nos cuenta: «Tengo amigos que padecen asma y a veces no pueden venir a Londres por lo perjudicial que es para ellos. Cuando empiezas a informarte sobre la contaminación del aire, te enteras de que, solo por su culpa mueren al año en el mundo siete millones y medio de personas. Es sencillamente inaceptable. ¡Una locura!».
Es ahí, nos explica Gomarsall, donde N2S trata de tener una repercusión positiva, aunque no resulta fácil. “Tenemos un desafío con respecto al mundo y al medio ambiente, ya que estamos utilizando combustibles fósiles de forma principal para generar energía y fabricar productos y de forma complementaria tenemos equivalentes en combustibles fósiles. Hay contaminación del aire, del agua, con el perjuicio que ello supone, y una gran demanda de dichas cosas. Es muy negativo, lo mires por donde lo mires”.
“A corto plazo las empresas que producen grandes emisiones se enfrentan a una presión mayor”, afirma Li. “El éxito del sector industrial del país es el trasfondo de la verdadera demanda en China de tecnología eficiente desde el punto de vista energético.”.
Li también concede mérito a los órganos de gobierno en el fomento de la innovación y las prácticas respetuosas con el medio ambiente, ya que “conforme los órganos gubernamentales regulan el vertido de aguas residuales de las industrias, cada vez más empresas se ven obligadas a adoptar sistemas de tecnología de concentración de salmuera como solución necesaria para reducir la repercusión en el medio ambiente”.
Gomarsall considera crucial la participación del gobierno. Sobre el crecimiento del negocio de N2S, nos desvela: «Estamos presionando a nivel de gobierno porque Reino Unido es el mayor exportador de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos. Esa es nuestra razón de ser, nuestro objetivo es convertirnos en la empresa de reciclaje más ecológica para las empresas tecnológicas B2B, las sociedades internacionales y el gobierno».
ESUS Mobility ha recibido apoyo del ayuntamiento de Valencia tras participar en el programa de la aceleradora Col·lab, donde se les dotó de un espacio de trabajo en un edificio administrativo de Las Naves. Sin embargo, debido a una nueva política la empresa se vio obligada a innovar de una forma totalmente involuntaria. Venturim recuerda: «Primero fue la idea del scooter familiar, pero después, cuando ya estábamos con el proyecto a medias, se produjo un cambio de legislación en España ¡que exigía que ese tipo de vehículo eléctrico ligero solo podía ser usado por una persona! Nos encontramos en una situación en la que teníamos un vehículo con capacidad para transportar dos personas, pero que solo podía llevar a una. Fue entonces cuando se nos ocurrió la idea de un vehículo básico con diferentes módulos de carga. Podías entregar paquetes, llevar equipo de limpieza de las calles, herramientas de trabajo, alimentos o equipaje de aeropuerto”.
Aunque de forma involuntaria, ya no ofrecían un vehículo solo para uso personal, sino que habían encontrado un nuevo mercado de trabajadores municipales, comerciantes y mensajeros que así evitarían conducir transporte que funciona con gas.
La tecnología ofrece soluciones para crear una cultura de sostenibilidad y respeto por el medio ambiente y se está logrando una implantación. Li explica que Modern Water ha aumentado su capacidad de fabricación para satisfacer el crecimiento de la demanda. Nos comenta que la empresa tiene otro proyecto: ”Crear instrumentos optimizados y miniaturizados más rentables, que recopilen datos de forma eficiente y que puedan ser tratados por modelos de inteligencia artificial, con el objetivo de lograr resultados más rápidos en mayor detalle”.
Para empresas de reciente creación como ESUS Mobility el futuro está en desarrollar su producto para que llegue a cubrir todas las necesidades de los clientes y asegurarse que la adopción sea lo más amplia posible. Venturim y Fran Soriano, director de Marketing, explican que están desarrollando tecnología para que los vehículos puedan circular por las zonas de peatones de forma segura. Aunque pueda parecer descabellado, Venturim puntualiza: “Resulta difícil decir qué es realista, ¡porque a veces se ven cosas en las noticias que parecen ciencia ficción!”.
Para Gomarsall y N2S, está claro cuál será el paso siguiente: “En el sector en el que estoy, siempre he dicho que necesitamos dirigirnos hacia una economía circular.
Hay 62 metales en un teléfono, no descansaré tranquilo hasta que la tecnología utilice materiales 100 % reciclados, o al menos cerca de esa cifra, y hasta que se pueda exponer toda la cadena de suministro de cada uno de los componentes de dicha tecnología.
Todos tenemos trabajo que hacer... grande o pequeño”.